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jueves, 19 de mayo de 2011

PRIMER PASITO DE CUENTACUENTOS


La actividad del bloque V en un primer momento me trajo algún que otro quebradero de cabeza, sobre todo porque como he tenido poco contacto con libros infantiles y estoy un poco en la pobreza no disponía de cuentos en casa que no hubiesen sido ya contados en clase.
Y bueno pues me dispuse a buscar por internet a leer cuentos y cuentos pero ninguno me terminaba de convencer, porque iba a hacer cuentacuentos, cosa que tampoco había hecho nunca…
Al final tras una charla desesperada con mi madre me encendió la bombillita y busqué algún cuento relacionado con los miedos.

Lo voy a contar con mis palabras más o menos como lo he contado en clase a las compañeras, aunque el texto original lo saqué de esta página:
http://cuentosparadormir.com/audiocuentos/castellano/el-miedo-es-blandito-y-suave-audio-cuento-narrado-en-espanol-castellano

Marina era una niña morena, de mediana estatura  con unos ojos aceitunados y grandes. Se apellidaba Núñez pero en realidad… hasta sus padres le llamaban Marimiedos…
Marina tenía muchísimo miedo a la oscuridad y cada noche al apagar la luz de su habitación, uuuhhhss  tooodas las sombras le parecían monstruos o criaturas que le iban a hacer daño. Entonces siempre terminaba corriendo hacia la habitación de sus padres diciendo: -     ¡Maaamáaaa, papáaa, que creo que en mi habitación hay monsstruoss! Y sus padres con mucha paciencia día tras día la acompañaban y la decían que no había monstruos que la pudieran hacer daño, abrían el armario, levantaban la cama… y Marína lo entendía pero al quedarse sola en la oscuridad…. Uuuuhss otra vez los miedos volvían a aparecer!

Una mañana recibió en su casa la visita de su tía Valentina, la cual era conocida por su valentía, por haber viajado por muchos sitios y enfrentarse a muchas aventuras, incluso se habían hecho libros y películas con algunas de sus azañas.
Marina,con ganas de vencer sus miedos le preguntó a su tía:
-Tía Valentina… tu… ¿alguna vez has sentido miedo?
Y su tía le contestó:
-Muchísimas veces Marina, cuando era pequeña tenía mucho miedo a la oscuridad, no podía quedarme a oscuras ni un momento.
La niña se emocionó muchísimo; ¿cómo era posible que alguien tan valiente pudiera haber tenido miedo a la oscuridad?
- Quienes me ensañaron a ser valiente fueron unos niños ciegos. Ellos no pueden ver, así que si no hubieran descubierto el secreto de no tener miedo a la oscuridad, estarían siempre asustadísimos.
Y Marina dijo: - es verdad….  ¿y… me podrías contar ese secreto?
-¡Claro! …su secreto es cambiar de ojos. Como ellos no pueden ver, sus ojos son sus manos.
Entonces vamos a hacer una cosa: esta noche, cuando vayas a dormir y apagues la luz, si hay algo que te de miedo cierra los ojos, levántate con cuidado y trata de ver que es aquello, con los ojos de tus manos…. Y mañana me cuentas cómo es el miedo.
Marina aceptó, algo preocupada. Sabía que tendría que ser valiente para cerrar los ojos y tocar aquello que le asustaba, pero estaba dispuesta a probarlo, porque ya era muy mayor, así que no refunfuñó nada al irse a dormir y ella misma apagó la luz. Pero… al poco rato, uhhhhhss sintió miedo de una de las sombras en la habitación… pero decidió armarse de valor, cerró los ojos, se levantó con cuidado, abrió sus manos y se acercó a tocar aquella cosa misteriosa yyyy….

A la mañana siguiente, Marina fue corriendo a la cocina gritando… ya sé cómo es el miedoo!!!
(Aquí les preguntaba a mis compañeras si querían saber cómo era el miedo, les pedí que cerrasen los ojos y abriesen los de sus manos. Al hacerlo pudieron tocarlo).
¡¡El miedo es blandito y suave!!! Decía Marina, ¡¡es mi osito de peluche¡¡   
                                                             -FIN-

*Al llegar a clase pues daba un poco de cosilla ejeje no sabes si el cuento va a gustar y me trababa un poco en alguna frase. Pero bueno, veía que mis compañeras estaban un poco igual asique eso me hizo estar más tranquila jeje ya se sabe.. mal de muchos, consuelo de bobos XD
Me he dado cuenta que no contaba el cuento exactamente igual cada vez, por ejemplo la primera vez el osito de peluche lo saqué al final, pero luego se me ocurrió probar lo de hacerles cerrar los ojos para interactuar un poco más y funcionó jej, daba más emoción tocar sin desvelar lo que es.
Bueno, poco a poco me he ido soltando más y al final hasta le he cogido el gustillo jeje.
Aquí he podido comprobar que la experiencia hace mucho.

Respecto a los cuentos de los compis, pues puedo destacar como supongo que casi todos el cuento de Clara y su forma de narrarlo, que hace mucho también.
YY bueno, por ejemplo la lectura que ha hecho marta del Topo que quería saber quién se había hecho aquello en su cabeza también me ha gustado bastante J
Es una pena que no haya podido escuchar los de todos.

1 comentarios:

Irune Labajo dijo...

Perfecto.

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